16 de julio de 2012

El tiempo se alarga

Mañana, tarde, noche y medianoche se confunden. El tiempo se extiende, se alarga en un solo lapso que cruza de lado a lado mi mente y mi manera de absorber el entorno. A veces no hay horas, sino una larga vía de estupor. Tal vez, curiosamente, sean los olores los que me representan la altitud del día en la que me encuentro. Por ahora, estoy en una bruma negra de la que debo salir ya. Todo se oscurece más y más...