28 de mayo de 2010

En el espejo hay un rostro desconocido. En la calle veo rostros desconocidos. En mis recuerdos hay rostros desconocidos. No sé si esto es una jugarreta. En fin, saludo a esos desconocidos una y otra vez... saludo al viejo que me mira fijamente desde el espejo.

24 de mayo de 2010

Dias de ausencias

Hay días que dedico a las ausencias. Los dedico a aquellos nombres que parecen quedar en el exilio que les da el olvido, pero que como pájaros regresan una y otra vez; a la ausencia de rostros que no he recordado en mucho tiempo y que se van empolvando y borroneando; a la ausencia de personas que se van volviendo fantasmas, sombras perdidas entre las paredes de los días. También le dedico a las ausencias recientes... las más doloras, las que con dientes destellantes muerden y arrancan un trozo; esas que con mano helada aprietan tanto el corazón que dejan exhaustos. Esta falta de presencias; este faltar tan nuevo, tan próximo, es lo imposible de no tener en cuenta. Quisiera echarles semanas encima, taparlas con los meses... pero a la vez quiero dejarlas frescas, como heridas abriertas al sol... y que se poblaran de nuevo.

6 de mayo de 2010

Un día más

Un día más de existencia en autobuses que van y vienen. En este verano azul el calor estalla en los cristales. Miro el pavimento y casi percibo su olor. En fin, es el día brillante que me abrasa en mi asiento, que desconcentra mi disco duro y no me enfoco en el artículo sobre Ruiz Safón. Respiro despacio, me muevo con lentitud... la ciudad arde como el infierno y los mismos demonios nos estamos tostando en ella. Ya no sé en que renglón de mi lectura estaba... de hecho, ya no me importa.